domingo, 19 de febrero de 2017

MALLORCATUR, AHORA EN MONÓLOGO



Compuesto en 1988, el musical Mallorcatur fue fruto de un esfuerzo conjunto entre Raphel Pherrer, Toni Miranda y el que esto firma. Salió en forma de vinilo, pero nunca se pudo montar en la forma para la que había sido concebido. Quedó así, como un disco raro y de culto.

En 2004, Toni Noguera lo remasterizó y salió en forma de CD. Ello dio lugar a unas cuantas actuaciones, pero que tampoco llevaron a ningún sitio.

Veinte años después, en 2008, por fin interpretamos las canciones en el teatro Sans, con la participación de Miquela Lladó y Miquel Ferrà. Fue una noche inolvidable, pero allí quedó todo.

Ahora, casi diez años más tarde, me he decidido a volverlo a llevar a la escena. En pequeño formato. Como un musical invisible. Bajo la forma de monólogo.

Lo estreno el sábado 25 en La Violeta de Gràcia (Barcelona). En marzo, pasará a Mallorca.

sábado, 4 de febrero de 2017

EL ESTRENO DE "TE LO CONTARÉ EN UN VIAJE"


(Foto: Ricard Cambra)


 Cuando escribí "Te lo contaré en un viaje" estaba convencido de que sería un fracaso. Lo hice siguiendo la voluntad de Alba, y con la urgencia de no olvidar los detalles de la historia. "Nadie querrá leer sobre dramas", me decía.

  Luego, el libro hizo su camino. Tuvo una notable repercusión, y me marcó emocionalmente durante bastante tiempo.
  
  Quince años después, surgió la posibilidad de llevarlo a la escena teatral. Era una nueva incógnita, y suponía otra vez un esfuerzo. Tanto de trabajo como de sentimiento. Pero gracias a Ferran Terraza, que puso todo su empeño en ello, y a la maestría de Alain Chipot como director, terminó por completarse. Otras personas colaboraron de forma muy valiosa: Daniel Gener como diseñador de luces, Ricard Cambra en el álbum fotográfico, Júlia Orbegoso en la realización del vídeo, Myrna Cambra y Assumpta Mañà en la producción, Mariona Forteza en el diseño, Frank Capdet y Roser Batalla con sus opiniones, Pia Muñoz, Edgar Reig, Carla Vidal... Todos ellos en el empeño de llevar adelante un proyecto sin ningún apoyo y de resultados imprevisibles.

 Porque te volvías a plantear otra vez: ¿Quién quiere escuchar una historia dramática?

  Finalmente, el pasado 31 de enero tuvo lugar el estreno. Era el momento de la verdad. El público se emocionó con la interpretación profunda y llena de matices de Ferran Terraza. La sumaria escenografía llenó el espacio de mundos. Y las luces proyectaban luces y sentimientos. Una vez más, la historia llegó al corazón de la gente.

  Una historia de la que uno no es autor ni tiene mérito alguno. Es un simple transmisor.

  Pero quería dejar patente mi agradecimiento a tan magnífico equipo, y al Teatre Gaudí que apostó por nuestra historia.

  Gracias.